En este portal utilizamos datos de navegación / cookies propias y de terceros para gestionar el portal, elaborar información estadística, optimizar la funcionalidad del sitio y mostrar publicidad relacionada con sus preferencias a través del análisis de la navegación. Si continúa navegando, usted estará aceptando esta utilización. Puede conocer cómo deshabilitarlas u obtener más información
aquí
Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí. Iniciar sesión
¡Hola! Parece que has alcanzado tu límite diario de 3 búsquedas en nuestro chat bot como registrado.
¿Quieres seguir disfrutando de este y otros beneficios exclusivos?
Adquiere el plan de suscripción que se adapte a tus preferencias y accede a ¡contenido ilimitado! No te
pierdas la oportunidad de disfrutar todas las funcionalidades que ofrecemos. 🌟
¡Hola! Haz excedido el máximo de peticiones mensuales.
Para más información continua navegando en eltiempo.com
Error 505
Estamos resolviendo el problema, inténtalo nuevamente más tarde.
Procesando tu pregunta... ¡Un momento, por favor!
¿Sabías que registrándote en nuestro portal podrás acceder al chatbot de El Tiempo y obtener información
precisa en tus búsquedas?
Con el envío de tus consultas, aceptas los Términos y Condiciones del Chat disponibles en la parte superior. Recuerda que las respuestas generadas pueden presentar inexactitudes o bloqueos, de acuerdo con las políticas de filtros de contenido o el estado del modelo. Este Chat tiene finalidades únicamente informativas.
De acuerdo con las políticas de la IA que usa EL TIEMPO, no es posible responder a las preguntas relacionadas con los siguientes temas: odio, sexual, violencia y autolesiones
Estados indecisos, otra vez la clave en presidenciales de EE. UU.
Joe Biden obtiene, de momento, 238 votos al Colegio Electoral, mientras que Donald Trump, 213.
EE. UU. y el mundo permanecían en ascuas a la espera de resultados finales para determinar el ganador entre en la contienda presidencial entre el demócrata Joe Biden y el republicano Donald Trump.
Hasta el cierre de esta edición, Biden obtenía victorias en 14 estados y el distrito de Columbia (Delaware, Maryland, Massachusetts, Vermont, Nueva Jersey, Nueva York, Connecticut, Nuevo México, Illinois, Nueva Hampshire, California, Washington, Oregón y Virginia) y sumaba 205 votos al Colegio Electoral, mientras que el presidente ganaba en otros 20 (Kentucky, Virginia del Este, Tennessee, Oklahoma, Indiana, Arkansas, Dakota del Sur, Dakota del Norte, Alabama, Carolina del Sur, Utah, Luisiana, Nebraska, Missouri, Kansas, Wyoming, Misisipi, Idaho, Montana y Ohio) alcanzado 139 votos. Se necesitan al menos 270 para ganar la Casa Blanca.
Además, Biden le sacaba a Trump un millón de votos en el voto popular.
Los resultados, de momento, no arrojaban sorpresas pues se trataba de estados que claramente favorecen a uno u otro partido. Pero si planteaban una carrera más competitiva de lo que se anticipaba. Los ojos, por lo tanto, seguían puestos en un grupo de 8 estados de los llamados “indecisos”, donde se definirá la carrera.
Dado el sistema de votación que existe en EE. UU. y la gran cantidad de votos que fue depositada por correo y de manera anticipada, era previsible que el conteo en ellos tardará más en conocerse y de allí la incertidumbre.
Aun así, unos pocos comenzaban a decantarse. En el caso de Florida, que suele ser importante a la hora de determinar el ganador, Trump iba adelante con el 51 por ciento del total habiendo sido escrutado el 94 por ciento de la votación. Se trata de un estado vital para las aspiraciones del presidente, pues una derrota ahí le hubiese cerrado las puertas de la reelección.
Biden, por su parte, encabezaba el conteo en Arizona, otro estado que ganó el presidente en 2016 y que necesita nuevamente en esta ocasión. Pero todos los ojos estaban puestos en el llamado “muro azul”, un grupo de tres estados (Míchigan, Wisconsin y Pensilvania) que eran considerados bastiones demócratas, pero que apoyaron a Trump hace cuatro años por un margen mínimo.
Los resultados preliminares en ellos no permitían aún declarar un ganador y podrían pasar muchas horas antes de conocer los resultados finales. Uno de los sucesos más destacados de la jornada fue el de la participación, que seguía rompiendo los récords previos.
Esta es la campaña de Joe Biden. Foto:EFE / EPA / CRISTOBAL HERRERA-ULASHKEVICH
Aunque todavía faltaban muchos estados por contabilizar, en casi todos registraban cifras superiores a ciclos electorales anteriores. Otro de los datos que parecía emerger en el estado de la Florida es que Trump mejoró considerablemente con los hispanos, especialmente en el condado de Miami-Dade, donde vive una mayoría de cubanos, venezolanos y colombianos. Se trata de un condado que Hillary Clinton ganó con el 66 por ciento frente al 32 por ciento de Trump, pero en esta ocasión Biden solo lograba el 54 por ciento. En otras palabras, el presidente subió su caudal de votación en al menos 150.000 votos en esta zona y se estima que una buena mayoría fueron hispanos.
Mientras esperaban los resultados finales, Trump se instaló en la Casa Blanca con cerca de 250 invitados y Biden permanecía en Wilmington (Delaware), junto a su compañera de fórmula Kamala Harris, de su familia y de la campaña.
Mucha expectativa existía ante la posibilidad de que Trump, como ha amenazado, pudiera declarar un triunfo aun cuando no ha terminado el conteo de votos. Pero este martes indicó que no lo haría hasta tener certeza del resultado.
Biden, por su parte, dijo que esperará a que todos los sufragios sean contados y que solo dará declaraciones una vez tenga algo que contarles a sus seguidores.
En líneas generales, y a pesar de algunos incidentes aislados, la elección transcurrió sin mayores contratiempos. Varios estados, entre ellos Pensilvania, reportaron demoras en la votación de hasta 3 horas en algunos casos.
También se conocieron algunas encuestas a boca de urna que ofrecían pistas. Aunque aún muy preliminares, estas mostraban un voto compuesto por menos personas de raza blanca comparado con hace cuatro años y más votos de minorías. El 65 por ciento eran blancos (vs. el 74 por ciento en 2016), un 13 por ciento hispanos, 12 por ciento afroestadounidenses y casi 10 por ciento asiáticos y otras razas (35 por ciento en total). A grandes rasgos, un panorama más favorable para Biden, pues el voto blanco favoreció a Trump (el 54 por ciento vs. 40 por ciento para Hillary), y las minorías estuvieron más en contra (25 vs. 75 por ciento).
En cuanto a edades, la distribución parecía muy similar a los porcentajes del 2016 con un leve incremento en la población mayor de 65 años que, según las encuestas, en este ciclo electoral estaría más inclinada hacia el vicepresidente. Pero otro dato que arrojaban los exit polls podría ser interpretado como favorable para Trump. Si bien el 52 por ciento indicó que la lucha contra la pandemia del coronavirus iba por mal camino, un 48 por ciento señalaba lo contrario.
Se trata de una cifra que no coincide con las encuestas más recientes, donde casi un 60 por ciento decía que las cosas no marchaban bien y le achacaban la culpa a la istración republicana. En otras palabras, según este exit poll, sería menos la gente que lo critica.
Un partidario de Trump ondea una bandera estadounidense frente a los manifestantes en la plaza Black Lives Matter frente a la Casa Blanca el día de las elecciones en Washington. Foto:Olivier DOULIERY. AFP
Por supuesto, dado el sistema electoral de EE. UU., el impacto de estos números depende del estado donde votaron y la cantidad total de sufragios. Muchos expertos, además, indicaban que en esta ocasión no prestarían mucha atención a las encuestas de boca de urna, pues una gran mayoría de estadounidenses voto por correo o de manera anticipada y el electorado que acudió este martes –y en el que se basan estas encuestas- era más republicano que demócrata.
Día de votaciones tranquilas pese a la tensión
Cuando un periodista de la agencia AFP le preguntó a Claire D’Angelo, una mujer de 45 años, durante la jornada electoral de ayer en Pensilvania cuáles eran sus ánimos, ella respondió: “Decir que estoy nerviosa o ansiosa es quedarse corto”.
D’Angelo, quien votó en uno de los estados pendulares de estas elecciones, resumió las sensaciones de alta tensión que se vivió en Estados Unidos durante todo el 3 de noviembre.
La jornada arrancó con la noticia de la cifra récord de votación anticipada por correo. Según Election Project, unas 100 millones de personas se anticiparon para ejercer su voto. Se estima que unas 65 millones lo hicieron por correo y cerca de 35 millones lo hicieron de forma presencial antes de este martes.
Pero pese a esa cifra, también hubo una alta participación presencial y largas filas durante la jornada de en estados como Texas, Florida y Arizona. Y si bien hubo informes dispersos de algunos problemas de simpatizantes de lado y lado en varios lugares de votación, el proceso de votación funcionó bien en todo el país. También hubo contrastes en los estados y zonas menos pobladas, donde las filas fueron ágiles y prácticamente inexistentes.
Debido a los nueve husos horarios distintos que hay en el país, los primeros estados en cerrar las urnas fueron Kentucky e Indiana. Luego siguieron Vermont, Virginia, Carolina del Sur y Georgia. Sobre las 7:30 p. m. (hora de Colombia) también cerraron Nuevo Hampshire y Florida. Finalmente, los últimos en cerrar, sobre la medianoche, fueron los estados de la Costa Oeste, entre ellos California y Alaska.
Otro frente de batalla en estos comicios eran las redes sociales. Allí, el día transcurrió sin grandes incidencias en Twitter y Facebook, que temían la propagación de noticias falsas.
Lo más destacable ocurrido a lo largo del martes fue la suspensión de varias cuentas de reciente creación vinculadas a medios de derecha tanto en Twitter como en Facebook por actuar de forma coordinada, es decir, compartiendo el mismo contenido a la vez. Este tipo de comportamiento es considerado no auténtico por las redes al no ser transparente.
Los comicios de ayer, entre Donald Trump y Joe Biden, sellaron una de las campañas por la presidencia más tensas de los últimos años en la historia política de Estados Unidos.
Y no es para menos. La votación se dio en medio de un país que está sacudido por la pandemia del coronavirus, las protestas por los asesinatos policiales contra afroestadounidenses y por un Donald Trump que no dejó de sembrar dudas sobre los recuentos de los votos.
(Visite el especial de cubrimiento de las elecciones aquí)