Muchas personas, sin importar
el talento que son capaces de demostrar para áreas como la música y el arte, deciden estudiar una carrera formal convencidos de que
lo otro es únicamente un hobby, pero después de leer esta historia quizá quieran reconsiderar esa idea.
Jason Nelson compartió a través de un artículo en el medio Business Insider que creció rodeado de música. Es saxofonista, pianista y empresario, incluso tiene un certificado en artes. Sin embargo, en un inicio optó por el mundo del trabajo formal.
Cuando se graduó en 2017 comenzó a trabajar como asistente de estrategia y luego como coordinador. En su empleo de tiempo completo ganaba alrededor de US$125.000, pero nunca dejó su hobby y gracias a las redes sociales encontró su verdadera vocación.
En su cuenta de Instagram regularmente publicaba videos cortos de canciones populares tocadas en piano y saxofón y por ello la hermana de una amiga lo contrató para amenizar su boda en donde fue todo un éxito, por lo que se puso en o con varias empresas de entretenimiento en su zona y comenzó a tocar en cada vez más eventos.
Más allá de su talento musical, él considera que la razón por la cual ha tenido éxito es que constantemente le dicen que es el alma de la fiesta pues disfruta entretener a los demás.
Aunque fue ganando cada vez más contratos, el camino no siempre fue fácil. Cuando la pandemia llegó, y todo el sector de entretenimiento tuvo que cerrar, tuvo suerte de seguir manteniendo su trabajo habitual para tener ingresos fijos, pero no dejó de invertir en su empleo secundario y continuó alimentando sus redes sociales y haciendo relacionamientos virtuales.
En octubre pasado finalmente tomó la decisión de dejar totalmente su trabajo formal, ya contaba con ahorros suficientes para poder
mantenerse por su cuenta si es que no tenía contrataciones. Pero ha sido todo lo contrario y
asegura que hoy gana alrededor de US$175.000 al año.Siempre tuvo talento para la música, hoy gana cientos de miles de dólares con ella
Jason Nelson dijo que desde que era pequeño se dio cuenta de que simplemente escuchando una canción era capaz de imitarla, por lo que aprendió a tocar instrumentos musicales como el saxofón y el piano.
Durante sus tiempos libres en la universidad dedicaba muchas horas a mezclar pistas para sus amigos y en ocasiones fungió como DJ, hasta que en 2015 recibió la oportunidad que le hizo ver que podía dedicarse a lo que más le gustaba.
Hoy, gracias a su experiencia en el marketing, él mismo maneja sus redes sociales y procura tener sus gastos comerciales controlados.
Dijo que sus paquetes para eventos tienen un precio de al menos US$2.500 pero llega a cobrar hasta US$5.000 y que su nuevo empleo lo ha llevado a conocer lugares como Puerto Rico e incluso Dubai.
También señaló que aunque en un inicio la mayoría de sus procesos eran manuales, poco a poco ha ido aprendiendo y actualizándose en tecnología lo que le ha permitido mejorar sus ingresos y ser más profesional.
También recomendó a quienes busquen emprender su propio negocio buscar qué los hará diferentes al resto, en su caso, señaló que le encanta adaptarse a la situación y cambiar según el humor de su público.
"No me arrepiento de haber dejado mi trabajo corporativo. Mi vida ha sido mucho más estable en los últimos cinco años", finalizó Nelson.