Una
reconocida cadena de comida rápida con recetas de la gastronomía mexicana
anunció que cerrará 48 de sus tiendas en el estado de California, al oeste de
Estados Unidos, y luego
se declaró en bancarrota del Capítulo 11, con
deudas de entre US$50'000.000 y US$100'000.000.
Con una importante presencia
en los estados de California, Arizona y Nevada, la cadena de comida rápida Rubio's Coastal Grill, de renombre en la región por sus tradicionales recetas,
anunció recientemente que cerrará 48 sucursales, y en primera instancia adujo como motivo de su decisión
el aumento sancionado por legisladores californianos para los empleados de tiendas de comida rápida a principios de año, el cual llevó el salario por hora de US$16 a US$20 a partir del 1° de abril.
A través de una declaración de un portavoz oficial en diálogo con el medio Restaurant Dive, la cadena anunció que tomó la decisión luego de realizar una "revisión exhaustiva de sus operaciones y del clima empresarial actual". Poco después, la cadena solicitó protección por bancarrota del Capítulo 11 frente al Tribunal de Quiebras del Distrito de Delaware.
En el informe presentado ante las autoridades, la empresa reveló que posee activos de entre US$10'000.000 y US$50'000.000, mientras que sus deudas ascienden a casi US$100'000.000. Aunque la decisión deja sin trabajo a miles de empleados en todo el estado y deja un panorama desalentador para el futuro, la compañía asegura que forma parte de un plan para volver a liderar las ventas a largo plazo.
El plan de la cadena de comida rápida en California
Actualmente, la cadena cuenta con 86 tiendas en tres estados, y cerrará casi la mitad de las que posee en California, en un movimiento que busca mitigar las pérdidas en medio de un escenario crítico para las tiendas de comida rápida debido a la caída en el consumo. Desde principios de año, muchos clientes dejaron de comer en restaurantes a causa de la inflación creciente en la economía estadounidense.
En un movimiento que busca incentivar el desarrollo a largo plazo, un portavoz de la cadena aseguró que la decisión no significa el fin de la compañía. "Aunque es doloroso, el cierre de las tiendas es un paso necesario en nuestro plan estratégico a largo plazo para posicionar a Rubio’s para el éxito en los próximos años", sostuvo.