Estados Unidos propone nuevo recorte a la ayuda para Colombia: así quedarían las cuentas

El Senado de Estados Unidos aprobó este jueves unos 380 millones de dólares para Colombia en ayuda correspondiente para el año fiscal 2025, que arranca en octubre de este año.

(En contexto: Colombia podría sufrir un recorte de hasta 50 por ciento de los recursos que Estados Unidos le asignaría para el 2025)

La cifra representa una reducción de casi el 10 por ciento en relación con los recursos que aprobó el Congreso para este 2024 (410 millones de dólares) y de un 25 por ciento si se toma como base lo que se autorizó para el 2023.

Puesto de otra forma, desde que llegó el presidente de Colombia, Gustavo Petro, a la Casa de Nariño, Estados Unidos ha reducido sus aportes al país en unos 100 millones de dólares si se llega a materializar el nuevo recorte propuesto por el Senado.

(Vea también: El Congreso de Estados Unidos pide evaluar compromiso de Petro con el Estado de Derecho)

Lo cual es muy probable pues los recursos propuestos por la Cámara de Representantes en su versión del mismo presupuesto para el año 2025 es solo de 208 millones de dólares.

Dado que ambas Cámaras deben ahora conciliar sobre un monto final, el “techo” de los recursos para el país no superaría los 380 millones de dólares que acaba de pedir el Senado.

Otro detalle interesante que emerge en el presupuesto aprobado por el Senado es que, a diferencia de años anteriores, la plata aprobada no está asignada a programas específicos en el país.

En otras palabras, se establece que “no menos de 380 millones de dólares” deberán ser gastados en Colombia, pero no se indica cuánto de eso fondos se dedicarán a la lucha contra las drogas o al desarrollo económico, salvo por un par de programas para respaldar la biodiversidad y la población afro.

Aunque los recortes no son exclusivos para Colombia y han tenido también que ver con otras presiones para reducir el presupuesto, la caída, según analistas, también obedece a una pérdida de interés por el país frente a otras prioridades domésticas e internacionales.

Al menos en lo relacionado con la Cámara alta, controlada por el Partido Demócrata. En el caso de la Cámara baja, encabezada por los republicanos, los recortes sí se atribuyen directamente al presidente Petro.

“El Comité reconoce y aprecia la profunda relación que Estados Unidos mantiene con el pueblo colombiano. Sin embargo, el Comité permanece profundamente preocupado por las políticas del presidente Petro y sus relaciones (con otros regímenes) que van en detrimento de los intereses económicos y en seguridad de Estados Unidos”, decía el documento que fue aprobado por esta dependencia del legislativo estadounidense.

El futuro de los recursos -y su monto final- es todavía incierto pues es muy probable que el Congreso no apruebe los fondos sino hasta el año entrante cuando ya se conozcan los resultados de las elecciones de noviembre y emerjan las nuevas mayorías en ambas Cámaras.

Así mismo habría que esperar a que se defina el nombre del próximo ocupante de la Casa Blanca y sus prioridades en política exterior.

En el tema de la erradicación, el proyecto del Comité de Apropiaciones del Senado dice que los fondos solo podrán usarse para apoyar un “programa iniciado por el Gobierno de Colombia que esté de acuerdo con la Constitución colombiana y con los acuerdos de paz de 2016”.

Así mismo, que los fondos estarán disponibles para programas y actividades que fortalezcan y amplíen la gobernanza, el Estado de derecho, el a la justicia, el respeto por los derechos humanos, la lucha contra el crimen organizado, el lavado de dinero y los delitos ambientales, entre otras cosas.

También se habla de apoyar a la población desplazada e inmigrantes en el país y las iniciativas de justicia transicional y reconciliación.

En Derechos Humanos, el comité pide un reporte en el que se constate que el Gobierno de Colombia está llevando ante la justicia el personal policial que ordenó, dirigió y utilizó medidas excesivas contra manifestantes en 2020 y 2021 y prohíbe cualquier la entrega de cualquier recurso que beneficie a las Farc o al Eln.

SERGIO GÓMEZ MASERI

Corresponsal de EL TIEMPO

Washington