El fenómeno que causaría la prohibición del aborto en este estado de EE. UU.

Recientemente, se desató la polémica en Arizona, Estados Unidos, a partir de la aplicación de una vieja ley sobre el aborto. A partir de una decisión de la Corte Suprema estatal, volverá a aplicarse la legislación de 1864 que prohíbe los abortos en cualquier circunstancia, a excepción de los casos en los que la vida de la madre se encuentre en peligro. Con este panorama, expertos advirtieron que aumentarán la cantidad de cruces de estado por motivos de salud.

La determinación se conoció el martes y dio lugar a mucha controversia. De acuerdo con lo que establece la ley de hace 160 años, se criminalizan todos los abortos en Arizona y solamente es posible interrumpir el embarazo si, de acuerdo con la opinión médica, la vida de una mujer se encuentra en peligro y es necesario hacerlo.

A partir de la aplicación de esta normativa, comenzaron las reacciones y los intentos por evitarla, incluido un intento legislativo que rápidamente fue frenado por sectores republicanos. Dado que en el corto plazo no habrá modificación posible, no tardarán en llegar los efectos derivados de esta prohibición.

De acuerdo con expertos consultados por CBS News, lo que inevitablemente comenzará a ocurrir a partir de la aplicación de esta ley es que se multiplicarán los cruces de estados para practicarse abortos. Ante la imposibilidad de hacerlo en su lugar de residencia, mujeres de Arizona se verán forzadas a hacerlo en otras partes del país. Según los testimonios recogidos, esto puede traer graves consecuencias de salud, ya que extender el tiempo de espera necesario para interrumpir el embarazo aumentaría las probabilidades de que las mujeres tengan diversos inconvenientes.

Aunque se espera que este fenómeno se intensifique dadas las nuevas condiciones en Arizona, lo cierto es que no se trata de algo nuevo. Los movimientos de personas entre estados para realizarse abortos aumentaron notablemente en los últimos años. Mientras que en el 2020 las interrupciones del embarazo realizadas en mujeres que venían de otros estados representaban el 9 por ciento de los abortos en todo Estados Unidos, en 2023 alcanzó el 16 por ciento.