Proyectos de infraestructura que le apuestan a la competitividad

En los últimos cuatro años en el Valle del Cauca se han invertido cerca de $500.000 millones en proyectos de infraestructura de transporte, con los cuales la Gobernación le ha apostado a corredores productivos y turísticos fundamentales en el territorio u obras de gran envergadura que cuentan con avances significativos, incluso algunas de ellas ya terminadas; aunque también se ha venido haciendo una importante recuperación de vías por afectación de temporadas de lluvias y mantenimiento para mejorar las condiciones de transitabilidad.

Según el secretario de Infraestructura del Valle, Frank Ramírez, “de esos recursos, $34.000 millones se han destinado para obras de mantenimiento periódico; $40.000 millones para mantenimiento rutinario; $75.000 millones para atender obras de calamidad; $6.000 millones para atención inmediata; $18.000 millones para maquinaria amarilla y el resto del presupuesto para las obras de gran impacto, como la doble calzada Cali-Candelaria, que se entrega ahora en agosto. Así mismo, el puente Omar Torrijos, en La Unión (puesto en funcionamiento a finales de 2021 y que beneficia a más de 94.000 habitantes), y la doble calzada entre Cali y Crucero Dapa (antigua vía a Yumbo), que ya se terminó, entre otras”.

A esto se suma que en Tuluá sigue en proceso de desarrollo el segundo tramo entre San Rafael y Barragán y la ampliación de la vía Tres Esquinas.

También se incluye el puente de la Carrera Primera (en Buga), la rehabilitación de la vía Simón Bolívar, en el tramo El Pailón-Aguaclara (en Buenaventura), que tiene un avance de 70 por ciento, y la ejecución del segundo tramo entre Ladrilleros y La Barra.

“Pero de igual forma está en marcha el mejoramiento y la rehabilitación de la infraestructura vial urbana y rural del departamento con el objetivo de impulsar el fortalecimiento económico y turístico por un valor de $28.611 millones, obras de las que se benefician los municipios de Guacarí, Ginebra, Palmira, El Cerrito, La Cumbre, Restrepo, Tuluá y Florida”, recalca Ramírez.

Por otro lado, para hacer frente a la fuerte ola invernal que azotó el departamento, que registró niveles históricos de lluvias, a lo largo y ancho del Valle del Cauca se han llevado a cabo proyectos de construcción de muros de contención, Box Culvert y puentes en Tuluá, Guacarí, Riofrío, Ansermanuevo, Roldanillo, El Cairo, Dagua, Vijes y Buga, que tuvieron una inversión de $15.000 millones.

Mientras en maquinaria amarilla, y con el objetivo de mejorar la transitabilidad en las vías, la Gobernación entregó el año pasado 22 máquinas nuevas en los municipios de Alcalá, Caicedonia, Calima, Dagua, El Cerrito, Ginebra, La Unión, La Victoria, Roldanillo, Trujillo, Zarzal, Buga y San Pedro, por un costo de $18.000 millones.

En ese mismo ritmo y bajo la estrategia de la 'Ruta Invencible por el Valle', se hizo una inversión de $34.000 millones para el mantenimiento periódico de las vías del departamento, sobre todo en lo que tiene que ver con los s a los municipios, que incluyeron bacheos, reparcheos, demarcación, señalización y obras complementarias que han impactado más de 234 kilómetros en 30 corredores de 28 municipios.

“Pero también se invirtieron $40.000 millones en mantenimiento rutinario de vías. Fueron más de 400 camineros por año quienes se encargaron de labores, como: rocería, limpieza de alcantarilla y cunetas; además de retiro de derrumbes, a menor escala. Con este tipo de trabajos se atendieron más de cinco kilómetros en todo el departamento, entre vías terciarias y secundarias, con las que se fortalece la conectividad para brindarles a los campesinos las mejores condiciones para movilizar sus productos, ya que somos una de las despensas agrícolas del país”, explicó la Gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán.

Como parte de las obras de Quinta Generación o 5G, en el Valle se destaca la nueva malla vial s Cali-Palmira, de la que se firmó el acta de inicio en septiembre de 2021, con una inversión de $1,22 billones (Capex a diciembre de 2020) y que representa la modernización e intervención de 310 kilómetros de vías que conectarán a Buga con Santander de Quilichao (en Cauca), las cuales beneficiarán a 3'300.000 habitantes de 12 municipios, además de mejorar la movilidad del tráfico pesado en el Pacífico colombiano y generar 40.000 empleos entre directos e indirectos inducidos.

Otras de las obras son la de Buga-Buenaventura, cuya meta es mejorar la conexión entre el Puerto de Buenaventura y los centros productivos del interior del país, además de beneficiar a las comunidades ubicadas en: Buga, Yotoco, Restrepo, Calima El Darién, Dagua y Buenaventura.

En agosto de 2022 se hizo la adjudicación de este proyecto a la firma española Sacyr Concesiones Colombia S.A.S, con una inversión de $2,21 billones de Capex-obra (cifra a diciembre de 2020), y se prevé la generación de más de 6 mil empleos directos, indirectos e inducidos.

“Esta iniciativa, en la que ahora se adelanta la etapa de preconstrucción, tiene una longitud concesionada de 128 km, con un corredor en segunda calzada a lo largo de 116 km. Aquí están proyectadas la rehabilitación, operación y mantenimiento de la vía existente”, precisa la ANI.

Como parte de las Concesiones del Bicentenario también se incorporan las intervenciones en el aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón, en Palmira, y en la terminal aeroportuaria de Buenaventura, Gerardo Tovar, este último con un presupuesto de $200.000 millones.

“La modernización del aeródromo internacional, que cuenta con una inversión de $880.000 millones, incluye la construcción de otro dique nacional paralelo, una terminal de bajo costo, la ampliación de la plataforma con nuevas posiciones de aeronaves para separar los flujos de ingreso y salida de pasajeros, una nueva torre de control y 24 puentes de abordaje. Estas obras deben ejecutarse en seis años y la nueva conexión tendría un tiempo de 30 años”, anota Manuel Reina, director de Desarrollo Regional de ProPacífico.

Los proyectos más ambiciosos de infraestructura con los que el Valle quiere garantizar la competitividad, son los que hoy articula la Gobernación con el Gobierno Nacional y el Bloque Regional Parlamentario.

Entre ellos se destacan las Vías de Samán, la doble calzada Buga-Buenaventura, los s Cali-Palmira (5G), el corredor Mulaló-Loboguerrero, el dragado del canal de al Puerto de Buenaventura, el Ferrocarril del Pacífico, el Tren de Cercanías y la concesión de los aeropuertos de Cali y Buenaventura.

Una de esas obras relevantes de infraestructura vial, a las que se le ha dado gran prioridad, según la gobernadora del Valle, Clara Luz Roldán, es a las Vías de Samán, que no solo mejorarán la movilidad, sino que permitirán la conectividad entre el Valle y Risaralda, en la que se intervendrán un total de 231 kilómetros y beneficiará a los municipios de Cartago, La Victoria, Riofrío, Roldanillo, La Unión, Toro, Ansermanuevo, Obando y Alcalá.

Este proyecto, que está a cargo del Invías, tiene un costo de $1,2 billones, que se financiarán con los recaudos del peaje Cerritos II.

“En la primera fase se entregaron 16,5 kilómetros rehabilitados, a principios de 2023, en la vía que comunica a Ansermanuevo con Toro y La Unión. Además, se realizó la rehabilitación y mantenimiento integral de los corredores Mediacanoa-Ansermanuevo-La Virginia y Ansermanuevo-Cartago. Actualmente se ejecuta el mejoramiento del retorno ubicado en el sector conocido como Carficol, Km 74 del corredor Cartago-Zaragoza. Este programa cuenta con la Gestión Vial Integral (GVI) que incorpora los servicios gratuitos de ambulancia, grúa y carro taller en los corredores Pereira-Cartago-La Victoria”, dice Manuel Reina, director de Desarrollo Regional de ProPacífico.

De otra parte, está el corredor Mulaló-Loboguerreo, que es el único proyecto de Cuarta Generación (4G) en el Valle, y también el único en Colombia que todavía no ha comenzado ejecución.

Esta obra que está a cargo de la ANI y demanda una inversión de $ 2,5 billones, tendrá de 31,8 kilómetros, se encargará de reducir -en 50 minutos- la conexión Cali-Buenaventura y brindará mayores alternativas en la red vial regional y nacional, garantizando condiciones óptimas de transitabilidad hacia y desde el puerto.