La magia de los pueblos antioqueños que esconde naturaleza, cultura y aventura

El departamento le está apostando a un turismo rural, o lo que es comúnmente conocido como ‘pueblear’; es decir, recorrer pueblos para sumergirse en la naturaleza, las experiencias, la cultura, la historia, sus sabores, las tradiciones, la calidez de su gente, su arquitectura y la aventura.

Actualmente, son 50 pueblos mágicos los que ya se han catalogado dentro de la estrategia Antioquia es Mágica, impulsada por la Dirección de Turismo de Antioquia, de la Secretaría de Desarrollo Económico del departamento. Entre ellos están Jardín, Jericó, Santa Fe de Antioquia, Guatapé y Medellín.

Además, otros 20 destinos están en proceso de consolidación como Marinilla, Barbosa, Venecia, Támesis, San Pedro, San Rafael, Abejorral, El Carmen, El Peñol, Concepción, Entrerríos, Cisneros, Santo Domingo, Arboletes y Necoclí.

“En todos estos pueblos lo que se busca es la promoción y creación de negocios verdes que tengan efectos ambientales positivos y ayuden a conservar los tesoros naturales del departamento”, recalcó Óscar Sánchez, director de turismo del departamento y añadió que están trabajando de la mano con el sector privado para fomentar el turismo regenerativo. “Es un nuevo paradigma dentro de la sostenibilidad, que va más allá de conservar; es más ambicioso, puesto que supone mejorar, sembrar y ayudar a repoblar el territorio de interés”.

Estas experiencias que permiten un o, tanto con la naturaleza como con la cultura antioqueña, cada vez más llaman la atención de nacionales y extranjeros. Y las cifras lo comprueban.

Desde Medellín, más de 3 millones de pasajeros se movilizaron por terminales terrestres hacia los municipios. Y 393.390 visitantes extranjeros no residentes arribaron al departamento, con corte al 30 de abril de este año, según datos del Sistema de Información Turística de Antioquia (SITA), avalado por ONU Turismo.

Asimismo, la ocupación hotelera alcanzó un 63 %, y el tráfico aéreo sumó más de 4,5 millones de pasajeros, de los cuales 3,4 millones corresponden a vuelos nacionales y 1,1 millones a internacionales.

“Estas cifras confirman la recuperación y consolidación del turismo como motor clave del desarrollo económico y territorial”, expresó el director de turismo, Óscar Sánchez.

A continuación les presentamos algunas opciones de la oferta turística en el departamento en los municipios de Abejorral, San Carlos, Alejandría y Jardín.

La tranquilidad del río Nare, en el municipio de Alejandría, se presta para hacer tubing, una actividad en la que un grupo de personas pueden ‘navegar’ el río sentados sobre unos grandes neumáticos que van conectados entre sí con una cuerda y dirigidos por un guía. Juan Fernando Vargas, de Ecoaventuras, aseguró que desde que era niño ha estado enamorado y conectado con el río, por lo que empezó a practicar esta actividad desde muy pequeño.

Se trata de una tradición de su tierra que hacían especialmente en la época de las Fiestas de Simpatía, durante el puente de Reyes.

“La actividad se le conoce como tubing, pero aquí le llamamos ‘bote paseo’. Es una tradición de muchos años atrás que decidimos volverla un atractivo para toda la familia, incluso niños y adultos mayores, cumpliendo con todas las normas de seguridad. Gracias al apoyo de la Gobernación de Antioquia y la alcaldía, hemos recibido formación para convertir a Alejandría en un destino turístico”, resaltó Juan Fernando Vargas.

Por ello, desde el 2018 abrieron su agencia local para promover esta actividad recreativa. Desde entonces, han venido trabajando en sinergia tanto empresas privadas como el sector público para fortalecer también la oferta de alojamiento y gastronómica del municipio.

“El turismo no se puede hacer solo, necesito complementarme con mis compañeros, trabajar de la mano para que el destino quede bien. Si uno solo falla en la atención, la persona se va hablando mal de destino, el voz a voz nos permite crecer, ofreciendo una buena experiencia y siendo embajadores de nuestro destino”, resaltó Juan Fernando Vargas.

Abejorral es un municipio turístico en potencia, ya que tiene todo un abanico de posibilidades para desconectarse de la cotidianidad y conectarse con la naturaleza a través de más de 25 rutas para hacer senderismo y la posibilidad de conocer reservas naturales, bosques nativos, cascadas, cañones, etc.

Dorany Palacio, del operador turístico y alojamiento La Ramada, aseguró: “propendemos para que el visitante que llegue encuentre en las experiencias una dinámica de bienestar y conexión que le permitan renovarse. Es una experiencia más terapéutica”, reveló Palacio y añadió: “Por ejemplo, en las cascadas de Santa Catalina la gente, además de conocer el paisaje, vive una experiencia de ‘melazoterapia’ que consiste en un masaje con melaza que es muy autóctono de la región”. También se pueden hacer senderos nocturnos en el bosque, en plenilunio (con luna llena), o visitarlas 7 cascadas de Pedernales, el ritual del café o el de la a, entre otras actividades.

Para Dorany, la magia de su municipio es que es un pueblo muy tranquilo y con las tradiciones muy arraigadas. “Aquí se ve al típico paisa, a los señores con su sombrero, con su mula, las chivas y su costalito al hombro. También se ven las chivas escaleras como transporte del pueblo. El diseño arquitectónico es hermoso, declarado patrimonio de interés cultural. Tiene muchas vías de y es ideal para el descanso”, resaltó Dorany.

Jardín es uno de los siete municipios de Antioquia que cuenta con sectores urbanos que son patrimonio cultural de la Nación. Allí, además de su riqueza arquitectónica caracterizada por su estilo colonial y casas con colores vivos y balcones de madera, se pueden hacer actividades como parapente, visitar cuevas de murciélagos, cascadas, o conocer dulces tradicionales, como el arequipe de arracacha, en la casa de los dulces.

Marlon Gutiérrez, del operador turístico Jardín Life and Travel, reveló que el murciélago de Jardín es fructífero y que es un mamífero restaurador de hábitat. “El murciélago puede viajar 60 Km en una noche llevando semillas. Es el segundo polinizador, después de las abejas. Y en el túnel de Piedra se pueden encontrar más de 3.000murciélagos en una sola cueva”, dijo Gutiérrez.

Además, está la Cueva del Esplendor, una cascada dentro de una cueva que ofrece un paisaje y experiencia sin igual. También se puede apreciar el Gallito de las Rocas, un ave emblemática del municipio, que está desde la Cordillera de los Andes en Venezuela hasta Bolivia. “Hacemos el avistamiento del ave a corta distancia, lo que es imposible en otros lugares. Acá se ha desarrollado una relación tan bonita entre el ave y el ser humano que permite verlo muy cerca”, explicó Marlon.

Y otra de las experiencias es conocer todo el proceso de apicultura, con una particularidad y es que se encuentra dentro de una finca cafetera. “Se creía que las abejas no podían ir de la mano con la cultura cafetera porque para tener abejas no se podía usar pesticidas. Entonces, en una finca decidieron garantizar el hábitat de las abejas, antes que el del café, y ahora conviven y ambos los trabajan con altos estándares de calidad”, resaltó Marlon. 

San Carlos, en el oriente antioqueño, se está consolidando como un municipio referente para hacer canyoning (barranquismo) en el país, una práctica deportiva que consiste en descenderlos cañones, siguiendo la ruta que traza el agua, e ir superando los obstáculos que la misma naturaleza da, ya sea con saltos, toboganes, nadando o incluso haciendo rappel(descenso por cuerdas) en cascadas. Hay cañones pequeños y grandes, con diferentes niveles de dificultad, por lo que hay opciones para toda la familia y otras dirigidas solo a expertos.

La actividad se puede hacer en grupos de 5 o 6 personas, siempre acompañados por dos expertos y con los elementos de seguridad. “Por nuestra topografía y geografía somos el epicentro del canyoning en Colombia”, resaltó Alex Foronda, de Turismo San Carlos.

De hecho, este año realizarán la tercera versión de ‘El Chispero Canyoning Fest’, del 22 al 27 de julio, en el que participarán cañonistas profesionales y aficionados, a nivel nacional e internacional, para explorar más de 10 rutas que ofrece el municipio para hacer esta actividad.

“Lo hacemos en representación de un cañón muy emblemático que se llama El Chispero. Lo comenzamos a descender más o menos a una altura de 1.300 metros sobre el nivel del mar y podemos llegar a descender hasta 300 metros. Es una experiencia única y maravillosa, el lugar es espectacular”, explicó Alex. En este municipio también está la Piedra El Tabor, un monolito como el de la Piedra El Peñol, en Guatapé, en el que también se puede hacer ascenso hasta la cima de la piedra. “Desde allí, se puede apreciar el río Magdalena serpenteando, parte de los farallones del Citará y el embalse de Punchiná, entre otros”, resaltó Alex Foronda.

Para impulsar el conocimiento de este monolito también organizaron una carrera de 14 kilómetros (que se hará el 24 de agosto) para subir y descenderla Piedra El Tabor. Así como una carrera en bicicleta por las montañas, de 74 kilómetros, que tendrá lugar el 21 de septiembre. Para él, la magia del municipio es el agua. “Somos el pueblo del agua, tenemos muchos cañones y cascadas. La comunidad gira alrededor del agua porque es vida, diversión, alegría y todo para nosotros”, aseveró Foronda.

Antioquia es un departamento ideal para el avistamiento de aves, ya que cuenta con 1.006 especies de aves (el 51% de las identificadas en el país y el 10% de las avistadas en el mundo), según confirmó la Sociedad Antioqueña de Ornitología (SAO) en la primera Guía de Campo de Aves de Antioquia.

De los 125 municipios de Antioquia 94 son cafeteros, y muchos tienen rutas consolidadas para turistas, además de bicirutas y puerto de montaña en todas las regiones. 

Más del 80% de Antioquia está cubierto de montañas, en gran parte por la Cordillera de los Andes. Tienen una montaña sagrada, Cerro Tusa, que se convirtió en un parque natural.

El departamento ha sido cuna de grandes escritores como Tomás Carrasquilla, Gonzalo Arango, Manuel Mejía Vallejo, Porfirio Barba Jacob, León de Greiff, Efe Gómez, entre otros.

Medellín alberga la colección más grande de obras de Fernando Botero en el Museo de Antioquia en Medellín. Según el Museo de Antioquia, las obras fueron donadas por el artista, incluyendo algunas de sus primeras obras y piezas más personales.

Antioquia es Mágica es la marca territorio y estrategia de promoción turística del departamento, que ya hace parte del ADN de los antioqueños. Conjuga los sabores, los saberes y los talentos de los diferentes municipios y, de manera especial, de los 50 que integran este programa.

La magia se debe, en primer lugar, a la hospitalidad y calidezdelpaisa,que es inconfundible y garantía de una grata experiencia; a sus exuberantes montañas, cañones, senderos, ríos y a la ricabiodiversidadquelohacenreferentenacionalenturismo de naturaleza, ahora conunenfoqueenregeneración y bienestar.

Tenemos 7 municipios patrimonio cultural de la Nación: Jardín, Jericó, Santa Fe de Antioquia, Rionegro, Marinilla, Concepción y Abejorral, y otra decena más que conservan la arquitectura colonial y colorida que dejó huellas tan sólidas como la misma caficultura que hoy embadurna nuestro territorio, como el segundo más productivo del país con el 15 % del grano.

Ser la cuna de la única santa colombiana, de ocho de los 13 beatos del país, tener 13 santuarios diocesanos y custodiar la única reliquia en la nación de primer grado de un apóstol también nos hace un destino religioso de peso, además del turismo literario y cultural.

El Best Tourism Villages es un reconocimiento que ONU Turismo hace cada año a los mejores destinos de turismo rural en el mundo. El año pasado fue postulado por Antioquia el municipio de Jardín y ganó. Y para este 2025 el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo avaló 8 de los 28 municipios que se postularon, entre ellos Jericó. Es un municipio que desde hace dos décadas trabaja en el turismo y que hoy es certificado en calidad y referente para otros pueblos.

Sobre sus coloridos balcones y arquitectura de colonización antioqueña, cuna del carriel paisa, y reconocido por sus cafés especiales y el cardamomo, se posaron los reflectores nacionales en 2004, con la canonización de la madre Laura, y con mucha más fuerza en 2013, cuando el Papa Francisco la canonizó. Este hito les sirvió mucho para fortalecer su oferta. Hoy tienen 2.985 camas, 28 restaurantes y 20 cafeterías. También sitios como el Museo MAJA, que ha tenido exposiciones de Andy Warhol, el Jardín botánico, el Museo de Arte Religioso, el Centro de Historia, la Casa Natal de la madre Laura, oferta de parapentismo y programación cultural con reconocimiento como el Hay Festival.

Este es un reconocimiento al trabajo comprometido y prolongado del municipio, a sus dirigentes y empresarios que no paran, y esperamos que una vez más el reconocimiento se quede en Antioquia.

Este es un departamento de pueblos, es decir, de ruralidad. Unos 20 municipios tienen uso de cuerpos de agua, siendo Guatapé y El Peñol, con su embalse de 1.640 hectáreas, los más representativos para actividades acuáticas deportivas.

Si bien Urabá tiene buena oferta para actividades de río, en especial en Mutatá, es en el Oriente, que se conecta con el Magdalena medio y Puerto Triunfo, el que ofrece una ruta única y espectacular conocida como “El cinturón de la aventura”. Contempla el Santo del Buey, entre La Ceja y Abejorral, con más de 10 saltos, cascadas, manantiales con canopy y escalada; San Francisco con el senderismo por ríos cristalinos; San Luis con el rafting; San Carlos con el canyoning y senderismo; San Rafael con body Rafting y el avistamiento de aves; el Carmen de Viboral con el río Melcocho, el más cristalino de Antioquia para el ecoturismo; y Alejandría con el tubing y el bienestar.

Para volar en parapente o ala delta están Barbosa, Cocorná y Jericó. Además, tenemos la experiencia del vino en Olaya, el único municipio de Antioquia donde se cultivan uvas; de los cultivos de flores en El Carmen de Viboral y La Ceja; de cafés y abejas en Venecia, Salgar y Jardín; de cacao en Támesis y Puerto Berrío, y el turismo regenerativo en el recién inaugurado Parque Cerro Tusa – La Montaña Sagrada, en el Suroeste