Así van las obras del Plan 500 en Cundinamarca

En total serán 500 kilómetros de vías secundarias en el departamento de Cundinamarca los que serán intervenidos con el Plan 500 a través del recaudo de cinco peajes.

Según informó la Gobernación de Cundinamarca, son más de 680.000 millones de pesos los que se han invertido desde el 2021 para ejecutar 33 proyectos viales a través de obras de mejoramiento, rehabilitación vial y construcción de placa huellas.

Para Nancy Valbuena, gerente del ICCU (Instituto de Infraestructura y Concesiones de Cundinamarca), el balance hasta la fecha es positivo. “La idea es que la mayoría de las obras queden listas al finalizar esta istración, esa es la meta que tenemos. Ya todas las obras arrancaron y hay unas pocas que están próximas a iniciar obra”, resaltó Valbuena y añadió que “en algunas intervenciones hemos tenido que construir muros de contención”.

El Plan 500 tiene una gran particularidad. Se trata de la primera operación de crédito otorgado por un banco colombiano que se hace en el país y que tendrá como fuente de pago el recaudo de cinco peajes. De esta forma, la Gobernación de Cundinamarca logró obtener recursos por 400.000 millones de pesos en la fase inicial para intervenir vías no concesionadas que están a cargo de la Gobernación, porque las vías que generalmente se pagan con el recaudo de los peajes son las que tiene a cargo la Agencia Nacional de Infraestructura, y que en Cundinamarca corresponde a 14 corredores.

El departamento actualmente cuenta con 8.000 kilómetros de vías secundarias a cargo de la Gobernación, de los cuales 1.100 kilómetros están concesionados por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI).

De las obras del Plan 500, la troncal de Tequendama (Chusacá – El Colegio – El Triunfo – Viotá – El Portillo) es la que se encuentra en mayor estado de avance con una ejecución del 94,46 % y una inversión de 10.500 millones de pesos. Así mismo, hay intervenciones que por razones climáticas o por alto tráfico han tenido algunos retrasos, “por ejemplo, hay proyectos muy estratégicos como la vía Siberia y Tenjo, que ha tenido demoras en la ejecución porque se hacen planes de manejo de tráfico, pero las personas no aguantan más de dos horas de trancón y toca habilitar el corredor mientras se hacen las obras”, aclara Valbuena.

El ICCU puso en funcionamiento cinco peajes para lograr obtener los recursos. El primer peaje, entregado por el Invías, comenzó a funcionar en 2010, el cual está en la vía Sibaté- Fusagasugá - Pasca, también conocida como la antigua vía a Girardot. Con el recaudo de este peaje, ubicado en San Miguel, se mantienen 42 kilómetros de la vía Chusacá, Sibaté, Fusagasugá, Pasca.

Posteriormente, y en plena pandemia, el ICCU puso a funcionar tres peajes más, los cuales se implementaron en el 2021.

Uno de estos peajes es el que está ubicado en el municipio de Pacho y con el que se adelanta la rehabilitación de diferentes tramos de vía entre Zipaquirá – Pacho – La Palma, también conocida como la troncal de Rionegro, ya que este corredor, de los 98 kilómetros que tiene, limita en casi 25 kilómetros con el Río Negro.

Esta proximidad con el río ha hecho que, en varias ocasiones y con la creciente del río, la vía se haya inundado y se haya visto afectada. Por ello, adelantan la construcción de, por lo menos, 14 muros de contención en sitios críticos para que una vez culminada la intervención la vía no se vuelva a ver afectada. Para este corredor se invirtieron 90.000 millones de pesos.

La obra también incluye labores de pavimentación con mezcla asfáltica y la construcción de alcantarillas y cunetas para mejorar el drenaje del corredor vial.

“Esta obra es de un gran impacto para la provincia del Rionegro. Son cerca de 300.000 habitantes y personas que utilizan el corredor las que se verán beneficiadas para temas de turismo, comercio y agroindustria”, destacó Gustavo Vargas, subgerente de infraestructura del ICCU durante un recorrido por la obra.

Vargas añadió que el contrato se suscribió en diciembre del año pasado y culminará en diciembre de este año, por lo que esperan tener todos los tramos habilitados en dicha fecha. “Esta es la obra con más inversión de recursos del Plan 500”, destacó Vargas.

También están los peajes de Amoladero (Guasca – Gachetá – Ubalá – Gachalá) donde, a largo plazo, se intervendrán 112 kilómetros; el de La Balsa (Ubaté – Lenguazaque – Villapinzón)- con la rehabilitación de 50 kilómetros; y Nuevo Salto (Chusacá, San Antonio de Tequendama, El Colegio, Viotá, El Portillo) – con el mantenimiento de 91 kilómetros. Este último peaje, hacía parte de un corredor concesionado hasta finales de marzo de 2021; año en el que fue efectuada la reversión a la Gobernación.

Estas son algunas de las obras más importantes del Plan 500. Para conocer el listado completo y su avance de ejecución haga click en el siguiente link.

1. Troncal de Rionegro (vía Zipaquirá – Pacho – La Palma) - 22,51 %

2. Troncal del Guavio (vía Guasca – Gachetá – Ubalá – Gachalá) - 15,48 %

3. Troncal del Tequendama (Chusacá – El Colegio – El Triunfo – Viotá – El Portillo) - 94,46 %

4. Troncal del Carbón (Ubaté - Lenguazaque - Guachetá) - 30,79 %

5. Placa Huella Puerto Salgar – Yacopí - 38,60 %

6. Placa Huella Vía Pacho – Supatá – 38 %

7. Placa Huella Vía La Vega – Sasaima – 38 %

8. Placa Huella Vía Quetame - El Calvario (Meta) – 40 %

9. Placa Huella Vía Chaguaní – Guaduas - 34,79 %

10. Placa Huella Vía Pico de Gallo a la Inspección La Paz (Guaduas) - 34,79 %