‘La meta es comprar 600.000 hectáreas para la reforma agraria este año’: Juan F. Harman

Si bien la reforma agraria avanza a paso lento, pues no se ha entregado ni una cuarta parte de las tierras que se han comprado, el nuevo director de la Agencia Nacional de Tierras (ANT), Juan Felipe Harman, quiere acelerar los procesos para que este año se haga una compra masiva que permita alcanzar la meta de 1,5 millones en el cuatrienio.

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Que la prioridad sea recuperar la tierra de los antiguos paramilitares y de la mafia, que tiene la Sociedad de Activos Especiales (SAE). Ahí hay alrededor de 200.000 hectáreas para empezar. Estamos buscando una figura jurídica que pueda organizar muy bien esas compras masivas. Es muy importante honrar la palabra de un sinnúmero de compromisos que tenemos como Gobierno, como, por ejemplo, en La Mojana o en el Cauca, y que de alguna manera no han avanzado de la forma más rápida. Hay que restituir la tierra que produjo violencia y manchas de sangre en todo el país.

Entre compradas y recuperadas, la cifra oficial son alrededor de 270.000, unas 110.000 recuperadas y 160.000 compradas. Nosotros hasta ahora estamos recibiendo la entidad y viendo qué hace falta para perfeccionar las compras y las entregas. Queremos avanzar en los procesos de forma más rápida.

Llegar a las 600.000 hectáreas compradas y formalizar otras 1,2 millones, para lo que tenemos un presupuesto histórico de 5 billones de pesos. Hay mucho por hacer y tenemos las condiciones para hacer los ajustes institucionales necesarios.

Sí, eso esperamos. Los retos son sustanciales, pero lo más importante es que tenemos bien identificados los embudos. Vamos a acelerar los procesos. Por ejemplo, vamos a abrir una convocatoria pública para que se registren avaluadoras de todo el país y sirvan para el propósito de la reforma. También estamos hablando con la Supernotariado para que cree una oficina de registros públicos, cosa que nuestros procedimientos no vayan a las entidades o a las sectoriales y así acelerar los procesos. Vamos a tener una operación inmobiliaria sin antecedentes en la historia que requiere toda la transparencia y tranquilidad ciudadana en el marco de los recursos públicos.

Debo decir que ambos tienen razón, la ministra planteó en su momento que algunos de estos predios iniciaron trámite en otros gobiernos, y Vega, que él los está terminando en materia de notificación y esclarecimiento. Tenemos que concentrarnos en finiquitar los procesos e intentar avanzar en la entrega material y jurídica de los bienes.

Hay unos núcleos donde nos vamos a concentrar. Además de en la identificación puntual de la tierra improductiva, pues la reforma no solo parte de la construcción de justicia social sino de tener un país que produzca alimentos, que sea más productivo y use mejor su territorio. Hay tierra en el sur del Caribe, cerca del Pacífico, en el Meta, Tolima o Huila, entre otros.

Una concejal del Centro Democrático denunció un proceso del que estoy sumamente tranquilo porque es una pelea de una ocupación de siete barrios, pero que llevan años ahí. Cada vez que se demandaban y contrademandaban amenazaban con desalojar a la gente que está allá. La decisión que tomé fue legalizarlos, cosa que cuando el día de mañana el municipio tenga que comprar esa tierra, no sigan cogiendo de carnada a las personas que están asentadas, que son pobres y vulnerables.