¿A partir de cuál edad una persona puede ser considerada longeva?

Históricamente, el tema de la vejez siempre estuvo en discusión en las distintas sociedades del mundo. A partir no solo de las cuestiones biológicas sino también culturales, se discute a partir de cuándo una persona es longeva. Para responder esa pregunta, se pueden consultar tanto las categorías que existen dentro de la ciencia como estudios que evalúan el impacto psicológico de la edad y cuáles son los factores que pueden alterar esto.

Como ya fue mencionado, la edad tiene un fuerte componente cultural. Según muchas variables que dependen de cada sociedad y la imagen que se tenga sobre la longevidad y las personas mayores, hay distintas concepciones. Sin embargo, si se quiere buscar una respuesta universal, existen algunas que pueden servir como guía.

En primer lugar, cabe destacar que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que una persona es longeva a partir de los 74 años y hasta los 90, mientras que pasada edad se indica que está en la vejez avanzada. Por otra parte, Dexeus remarca que tradicionalmente el umbral que marca que una persona se convierte en vieja es a partir de los 65 años. Lo cierto es que estas categorías fueron marcadas en otras épocas, con una esperanza de vida menor a la actual, e intentan establecer una norma general que deja afuera factores importantes.

En línea con lo mencionado, no existe una edad exacta en la que todos pasen a ser viejos y que indique que se sienten de la misma manera. Dependiendo el estilo de vida que hayan llevado a lo largo de los años, dos personas de 70, por poner un ejemplo, pueden tener vidas diametralmente distintas y sentirse muy diferentes en cuanto al funcionamiento de su cuerpo.

Sumado a esto, un grupo de trabajo de psicología del envejecimiento del Colegio Oficial de Psicología de Catalunya, citado por La Vanguardia, indica que todo depende de la percepción que tengan las personas sobre su edad y estado. Si se sienten activas y útiles, la vejez puede retrasarse o no ser algo negativo.