Más allá del entorno bursátil, cuando se habla de nikkei se suele hacer referencia a los emigrantes japoneses y a sus descendientes. En el mundo de la gastronomía, nikkei habla de la fusión de la cocina japonesa y la latina. Y quizás el país en donde más se ha dado este mestizaje culinario es en Perú, que tiene una importante inmigración japonesa.
Basta un ejemplo para entender lo maravillosa que puede resultar esta fusión: sushi japonés más ceviche peruano. Los ingredientes de mar, los cortes de un maestro, el juego entre lo picante y lo ácido, el toque de la soya.
Lo cierto es que hablar de cocina nikkei es hablar de una combinación de sabores y de técnicas que suele arrojar muy buenos resultados… cuando se hace con maestría, cuando se cuida el equilibrio de sabores, cuando se parte de buenos ingredientes.
He traído a colación la cocina nikkei a propósito de la reciente apertura de Mambo, un lugar del que seguramente se hablará mucho en los próximos meses. Un restaurante que llama la atención por su puesta en escena, su ambiente y su carta: una suma interesante para un público que anda a la caza de nuevas experiencias en torno a la cocina.
Hablando de fusiones, Mambo es el resultado de la fusión de expertos en buenos restaurantes y expertos en discotecas –con un escenario bogotano entre los 100 mejores del mundo, según la International Nightlife Association–, en donde la música es tan importante como la comida, y el ambiente tiene voltajes diferentes al mediodía y en la noche.
A pocos pasos del Parque de la 93, Mambo atrae las miradas desde lejos por sus espectaculares jardines y una bandera de Colombia que ondea en lo alto, como un símbolo poderoso, pues casi toda la infraestructura, el mobiliario, los objetos y los equipos han sido desarrollados en el país.
La verdad es que se come bien en Mambo. Empezar con un ají amarillo relleno de cangrejo puede ser una forma maravillosa para abrir la puerta a sabores muy atractivos. Luego vendrán saltados y tiraditos, gyosas y arroces, makis y cortes de diferentes carnes preparadas en esa parrilla japonesa que se conoce como robata. Vendrán combinaciones como la del salmón y la gulupa o la del pulpo y el maíz dulce.
Sí, suena bien este Mambo.
Mambo. Calle 93 A # 13 A – 06. Tel: 302-3570909
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Sancho
Crítico gastronómico