Encontraron los restos óseos del padre Darío Valencia, quien había desaparecido hace 5 meses en Pereira

Los restos óseos del padre Darío Valencia Uribe, quien había desaparecido hace cinco meses en Pereira, fueron hallados este viernes, 20 de septiembre en una zona rural de Belalcázar, Caldas.

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La información acaba de ser confirmada a este diario por el abogado Renato Marín, quien asiste a la Diócesis de Pereira en este caso que ha conmocionado a la capital de Risaralda. 

"Estoy acá en la Diócesis con este tema. Entiendo que esta va a sacar un comunicado acerca del tema", dijo Marín.

La Fiscalía también confirmó el hallazgo de los restos óseos: "Como parte de la acciones investigativas dispuestas por la Fiscalía General de la Nación, a través de la Seccional de Risaralda, con ocasión de la desaparición del sacerdote Darío Valencia Uribe, un equipo especializado del CTI apoyado por la canina especializada en búsqueda de restos humanos y la participación del Gaula de la Policía Nacional, realizó la diligencia de exhumación de un cuerpo humano en la vereda La Cascada, en Belalcázar (Caldas). Los restos serán entregados al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses para avanzar en las labores científicas y forenses que permitan la plena identificación. Al culminar ese proceso se harán las comunicaciones respectivas", señaló la Fiscalía.

El padre Darío Valencia Uribe, quien tenía 59 años, desapareció el 25 de abril pasado. Ese día se marchó en su vehículo particular en compañía de Julián Eduardo Cifuentes Gómez, quien, según el abogado Marín, era amigo del religioso desde hacía varios años.

En un video de una cámara de video quedó registrado el momento en que se marchan con rumbo desconocido. Esa fue la última vez en que fue visto con vida.

Días después de la desaparición del clérigo, Cifuentes huyó a Europa y el 30 de abril fue capturado en el aeropuerto Charles de Gaulle, en París, Francia, en cumplimiento de una circular azul que había emitido la Interpol. Sin embargo, Cifuentes quedó en libertad hasta que en su contra se expidió una circular roja. 

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A comienzos de este mes un fiscal especializado y un agente del Gaula de la Policía viajaron a Francia con el fin de interrogar a Cifuentes. Después de dos días de entrevista, el hombre confesó que asesinó al presbítero con cuatro disparos y ocultó su cuerpo cerca de Belalcázar, Caldas.

Cifuentes le entregó a los funcionarios del ente investigador y de la Policía Nacional las coordenadas del lugar donde dejó el cadáver del sacerdote. Durante esta semana las autoridades buscaron los restos óseos y los hallaron en las últimas horas.

REDACCIÓN ÚLTIMAS NOTICIAS