MilAgro, la marca que busca fortalecer a los campesinos de Antioquia

Como sello de confianza, calidad, inclusión, pago justo, origen e identidad territorial, fue creada MilAgro, una estrategia enfocada en conectar a las familias agricultoras de Antioquia con los consumidores y para mejorar sus ingresos con la llegada a mercados diferenciados gracias al apoyo del convenio de fortalecimiento del Sistema de Abastecimiento Alimentario de Antioquia (SABA).

El proyecto, que inició con una inversión de 24.000 millones de pesos, 12.000 millones aportados por la Gobernación de Antioquia y 12.000 millones por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), se trata de estructuras de comercio eficientes, equitativas, resilientes, sostenibles e inclusivas que contribuyen a reducir la pobreza rural con un enfoque agrologístico local encaminado al desarrollo rural integral.

“Después de varios análisis entre la secretaría de agricultura de Antioquia y FAO, la conclusión es que hay más de mil razones para impulsar y preferir el campo antioqueño, más de mil razones para trabajar por el agro regional, así nació el nombre, fruto de la unión de estas dos palabras y lo que se desea lograr, el MilAgro del campo antioqueño” aseguró sobre el nuevo programa, Rodolfo Correa, secretario de agricultura de la Gobernación de Antioquia.

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Se trata de una marca o sello de origen que pretende acumular los productos de los pequeños agricultores de la región, agrupándolos en centros de acopio subregional para formar un único movimiento u organización campesina para la comercialización y así eliminar la intermediación de terceros.

Es decir, se llega con un distintivo a los clientes finales para que los campesinos dejen de vender sus productos en costales y canastas donde no se acredita que los productos fueron cosechados en la región.

El sistema de abastecimiento tiene un centro de acopio en las diferentes cinco subregiones que están incluidas en el proyecto, el Suroeste, Norte, Bajo Cauca, Urabá y Oriente de Antioquia. Allí se agrupan los productos y se distribuyen a los almacenes de grandes superficies, a cooperativas de comercialización, a los supermercados o vendedores en general que se encargarán de entregarles a los consumidores finales los productos con la respectiva marca MilAgro.

Según cifras de la secretaría de Agricultura de Antioquia, se estima que el 70 por ciento de las utilidades del comercio agrícola se queda en manos de los intermediarios y estos intermediarios son quienes no agregan valor.

De ahí la idea de unir directamente a los productores con los comercializadores para eliminar los eslabones que son los que se quedan con la plata de los agricultores y que son quienes ocasionan que los consumidores tengan que comprar más caro.

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Juan Zuluaga, coordinador territorial de FAO y con funciones como coordinador nacional territorial, mencionó que el proyecto realmente impactará el abastecimiento alimentario en todos los actores que confluyen en él, que no solamente se comienza por la agricultura familiar campesina, sino, desde el paso anterior que tienen que ver con todos los proveedores e insumos necesarios para la agricultura y el paso posterior a la comercialización, donde se llevan los productos al paso de transformación como el catering en grandes eventos.

“Lo principal es que con los procesos se logrará identificar el producto local, que se logre vencer las barreras de transporte y que consolide una base social más fuerte donde se genera riqueza para las familias campesinas del departamento”, agregó Zuluaga.

Actualmente, más del 70% de los alimentos que se consumen en el departamento no se producen en Antioquia, ocasionando altos precios para el consumidor final, derivados de la larga cadena de intermediación, disminuyendo su frescura y aumentando la huella de carbono por los largos trayectos que recorren los productos para llegar a la mesa, así como el aumento de las pérdidas y los desperdicios en la cadena agroalimentaria, sin mencionar la afectación directa al productor campesino que recibe menos ganancia total por el fruto de su trabajo.

“Es una gran paradoja que los eslabones principales de la cadena, productores y consumidores, sean los más débiles, los que menos les toca los beneficios y los que más absorben los efectos negativos del sistema comercial”, agregó Correa.

Los Centros de Operación Logística construidos en las subregiones están pensados en las necesidades de cada una y donde se agrega valor a través de procesos de selección, empaque, identificación y distribución, todo con el objetivo de darles valor agregado para que las personas sepan que están comprando alimentos a los agricultores locales.

El lanzamiento oficial que será un encuentro gastronómico para saborear las delicias del campo antioqueño y donde se podrán conocer las historias de productores y comprar los primeros productos con el sello MilAgro, será el 10 de mayo en las instalaciones del pabellón de Parques del Río entre las 9:30 A.M. y las 12:00 del mediodía.

Dicha estrategia tiene vocación de permanencia, de autosostenibilidad y de empoderamiento desde el territorio para toda la ciudadanía. “Éste es el sistema agrícola más justo de todo el país y se prevé impactar a 25 mil familias”, puntualizó el secretario de Agricultura Correa.

ESNEYDER GUTIÉRREZ

Para EL TIEMPO