Universidad Nacional le pide ayuda a la Alcaldía de Bogotá por 'grave riesgo' de alteración al orden público este jueves

La carta está firmada por el rector José Ismael Peña y fue enviada a Aurora Vergara, ministra de Educación; Luis Fernando Velasco, ministro del Interior; Carlos Ernesto Camargo, defensor del Pueblo; César Restrepo, secretario de Seguridad y Andrés Castro, personero de Bogotá.
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​"Como anunciamos en comunicaciones anteriores en la Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá, se viene escalando una situación de riesgo de orden público, afectaciones a la convivencia de la ciudad y afectaciones a los bienes fiscales del Estado a cargo de la Universidad", afirmaron en el documento. 
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​En ese sentido, solicitaron un "especial acompañamiento" para este jueves 16 de mayo, día en el que se conmemoran los 40 años del "16 de mayo de 1984". 

Ese día, se presentaron intensas protestas en conmemoración al líder universitario Jesús 'Chucho' León, presidente de la cooperación estudiantil de aquella época y estudiante de odontología, quien fue asesinado en Cali el 9 de mayo de 1984. 

Lo que comenzó como una movilización rápidamente se convirtió en una tarde de fuertes disturbios y, posteriormente, en una masacre. La Policía Nacional, el F2 y el Grupo de Operaciones Especiales (Goes) llegaron rodeando el campus. 

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Se dice que ese día, incluso, ​un cuerpo de seguridad atacó a los estudiantes con armas blancas, y que a los capturados y fallecidos les colocaban capuchas hechas por las mismas autoridades para evitar su identificación posterior.

Un total de 81 personas fueron detenidas, 70 hombres y 11 mujeres, entre estudiantes, docentes, trabajadores de la Universidad Nacional y habitantes de la zona.

Estas personas, según investigaciones posteriores, sufrieron golpes, torturas y agresiones sexuales por parte de la Fuerza Pública durante su traslado a centros de detención.

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De los detenidos, de acuerdo con 'La W', 68 personas permanecieron en la Cárcel Distrital de manera irregular entre dos y cuatro semanas, y solo una fue judicializada y condenada.

Al menos 46 personas resultaron heridas, cinco de ellas por disparos de la Policía Nacional. La masacre nunca fue esclarecida y no se pudo determinar el número exacto de muertos y desaparecidos.

REDACCIÓN BOGOTÁ