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¿Por qué cambiaron los nombres de algunas estaciones de TransMilenio?

La medida impulsada por el Distrito busca generar ingresos adicionales para reducir el déficit del sistema.

Estación de TransMilenio, conocida como Alcalá. Foto: TransMilenio.

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Laura Valeria López Guzmán

16.03.2025 17:43 Actualizado: 16.03.2025 18:03

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Desde hace unos meses, los s de TransMilenio han notado un cambio en la nomenclatura de algunas estaciones. Lo que antes eran puntos de referencia icónicos, como la estación Calle 100 o Héroes, ahora llevan el nombre de reconocidas marcas comerciales.

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El cambio se enmarca dentro de los esfuerzos de la istración Distrital por reducir el déficit del sistema de transporte, una problemática que ha venido en aumento en los últimos años debido a la falta de recursos suficientes para cubrir su operación. Con el crecimiento del costo de la gasolina y el mantenimiento de la flota, la financiación de TransMilenio se ha convertido en un desafío.

Voceros de TransMilenio le explicaron a EL TIEMPO que los ingresos colaterales en los sistemas de transporte público en el mundo son una estrategia que contribuye a la sostenibilidad financiera para la operación y prestación del servicio de calidad.

Además, el uso de publicidad en sistemas de transporte público no es un fenómeno exclusivo de Bogotá. Ciudades como Nueva York, Madrid y Ciudad de México han implementado estrategias similares, permitiendo que empresas patrocinen estaciones o incluso líneas completas a cambio de ingresos significativos para el sistema.

En Nueva York, por ejemplo, la estación Barclays Center en Brooklyn lleva el nombre de la entidad financiera Barclays gracias a un acuerdo comercial de largo plazo. En Madrid, el metro ha vendido los derechos de nombre de algunas de sus estaciones, como Vodafone Sol, que en su momento generó ingresos adicionales para la red de transporte.

Estación de TransMilenio 'Calle 100'. Foto:TransMilenio.

En cuanto a TransMilenio, este medio conoció que la Subgerencia de Negocios Colaterales tiene como objeto liderar la formulación de estrategias en materia de explotación colateral y aprovechamiento económico del espacio público, a través de una gestión integrada entre talento humano, procesos o aliados en proyectos.

Esto se realiza a través de los acuerdos y la suscripción de contratos de ‘Naming Rights’; las entidades públicas o privadas adquieren el derecho de asociar su nombre a una estación del sistema para fortalecer su posicionamiento en la ciudad, y estos ingresos se destinan a la sostenibilidad, mejora del transporte público, el fortalecimiento de iniciativas para fomentar la cultura ciudadana, el cuidado y la apropiación del sistema.

Además, en el mundo cada vez es más frecuente que los sistemas de transporte masivo cuenten con ingresos colaterales que apoyen la sostenibilidad financiera de la prestación del servicio.

“Es común que los costos de la prestación de los servicios no logren estar cubiertos con la tarifa que pagan los s y, por lo tanto, los sistemas diseñan diferentes mecanismos para monetizar parte del valor que generan de otras maneras. En Colombia, muchos sistemas tienen ingresos colaterales y la ley nacional promueve que así se haga”, agregaron.

Un sistema con déficit

Según comentó Carlos Fernando Galán en su momento, TransMilenio cerró el 2024 con un aumento del déficit financiero debido a la renovación de la flota eléctrica que se realizó en los últimos años.

Este desbalance también se debe, en gran parte, a los costos operativos del sistema, que superan los ingresos generados por la tarifa que pagan los s. Para cubrir esta brecha, el Distrito ha recurrido a subsidios y nuevas fuentes de financiación, como la publicidad en infraestructura y buses.

La directora de TransMilenio explicó el año pasado que la venta de los derechos de nombre de las estaciones busca diversificar las fuentes de ingreso y mitigar la dependencia de los recursos públicos. “El objetivo es generar ingresos adicionales sin afectar la tarifa del pasaje, que ya de por sí es un tema sensible para la ciudadanía”, afirmó.

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Pero hay que tener en cuenta que el año pasado la empresa de transporte público generó ingresos colaterales por 28.783.427.715 de pesos, de los cuales recibió 5.763.327.135 de pesos por esta línea de negocios.

“Para los ingresos recibidos por explotación colateral no existe una destinación en los gastos de la entidad. Los recursos propios se utilizan para financiar el funcionamiento y los de inversión financian, principalmente, los servicios públicos de estaciones y portales, fuerza operativa, prestación del servicio de aseo en estaciones y portales, requerimientos asociados al proyecto de Modelo de Gestión Institucional”, detalló el vocero.

Además, EL TIEMPO conoció que, a través de la Subgerencia de Negocios Colaterales, tienen la obligación de buscar ingresos colaterales diferentes a los ingresos tarifarios con el fin de contribuir al equilibrio financiero del Sistema Integrado de Transporte Público.

Así mismo, deben promover modelos estratégicos de asociación con miras a la explotación de negocios colaterales que incentiven la complementación, cooperación e innovación frente a las alternativas de mercadeo, posicionamiento y consolidación de la empresa y su marca.

Es así como se han desarrollado diferentes líneas de negocios. Dentro de estas están la publicidad estática y digital; exhibición de publicidad en buses y denominación de estaciones o portales; información sobre tecnología, conocimiento y propiedad intelectual e inmobiliaria.

Y estas actividades de explotación colateral se realizan en el Sistema a cambio de una retribución económica, la cual tiene su soporte en la Resolución 297 de 2023. “Por medio de la cual se fija el esquema tarifario para la comercialización y explotación colateral a cargo de TRANSMILENIO S. A. y se dictan otras disposiciones”.

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Para que una empresa pueda participar, debe tener en cuenta el marco normativo de explotación colateral. Además, el interesado en suscribir un contrato de uso del nombre de estaciones con TRANSMILENIO S. A. tendrá que manifestar su interés a través de los diferentes canales o al equipo comercial de la Subgerencia de Negocios Colaterales que realiza gestión de su portafolio de servicios.

s del sistemas reciben el nuevo año con alzas en el pasaje que ahora es $3.100 en el servicio troncal y $3.100 el zonal.. Bogotá 3 de enero del 2023. FOTO @mauriciomorenofoto /MAURICIO MORENO EL TIEMPO CEET — s del sistemas reciben el nuevo año con alzas en el pasaje. Foto:MAURICIO MORENO EL TIEMPO

Además, cualquier empresa o marca que considere que su nombre puede considerarse un hito geográfico puede presentar una propuesta comercial en la que indique la marca que acompañará el nombre de la estación, el plazo o duración del contrato a suscribir y el valor de la remuneración dispuesto para ello.

Para que las propuestas sean seleccionadas, deben cumplir los requisitos técnicos, legales y financieros necesarios para suscribir el negocio de explotación colateral. Las marcas propuestas para acompañar el nombre de la estación o portal son presentadas al Comité Comercial de TRANSMILENIO S. A., órgano encargado de la aprobación de la marca que acompañará el nombre final de la estación o portal.

Con esto, Bogotá se suma a la lista de ciudades que han optado por vender los derechos de denominación de sus estaciones de transporte público. La publicidad puede representar un alivio financiero, pero no podrá ser la única solución a los problemas de fondo del sistema de transporte de la capital.

Laura Valeria López Guzmán

En X: @Lauravaleriolo

Redacción Bogotá

EL TIEMPO