La muerte de un civil en una celda de un centro de detención transitorio de Soacha (Cundinamarca) sigue siendo un misterio. El martes 24 de enero, a eso de las 9:50 de la noche, fue capturado por orden judicial John Edwar Bautista Quintero, de 30 años, por el delito de carnal violento y agravado.
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La acción fue realizada por la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) y el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) en jurisdicción del municipio. Bautista había sido denunciado en 2022 por su excompañera sentimental por ese mismo delito, (abuso), cometido contra su propia hija, de 8 años.
“La noche del 24, finalmente, el hombre fue trasladado a un centro transitorio de detención donde permaneció en una celda”, dijo el coronel Álvaro Mora, comandante de la Policía Metropolitana de Soacha.
Para el miércoles 25 de enero, hacia las 8:30 de la mañana, Bautista fue trasladado a la audiencia de legalización de captura ante un juez de la República. En dicha diligencia se le expidió la medida de privación de la libertad en un centro carcelario.
Hacia las 4 de la tarde, el hombre retornó al centro transitorio, pues era la forma de comenzar a acatar la decisión del juez tras examinar las pruebas entregadas por la Fiscalía.
El indiciado entró a una celda donde son llevadas las personas imputadas. Allí había alrededor de 73 personas. Los primeros indicios señalan que Bautista duró allí cerca de 20 minutos. Lo que pasó después, según algunos testigos, es que se escucharon unos ruidos. Parecía algo así como una riña, pues los sonidos eran escandalosos.
Cuando las autoridades del lugar se percataron de la novedad acudieron al sector en donde se encontraba recluido, lo encontraron y, según la institución, lo auxiliaron. Lo primero que hicieron fue trasladarlo, otra vez, a la celda de transitorios. Allí, Bautista manifestó que sentía dolor en el abdomen y en el tórax y que tenía dificultad para respirar. “Por eso fue llevado en un vehículo de la Policía Nacional hasta el hospital Cardiovascular de Soacha”, explicó Mora.
Los médicos intentaron salvarle la vida, pero, poco tiempo después, informaron su fallecimiento. “Inmediatamente se notificó al Ministerio Público, a la Personería de Soacha y a la Fiscalía todo lo que había sucedido para que asumieran la indagación y los actos urgentes”, dijo Mora.
La Policía Nacional dice que en este caso garantizó el debido proceso para auxiliar a la víctima, para contener posibles desmanes y para dar inicio a la investigación.
Ya hay evidencias físicas y elementos materiales probatorios que están bajo custodia de las autoridades para establecer quiénes fueron los responsables de este hecho.
CAROL MALAVER
Subeditora Bogotá