Localidades de Bogotá son impactadas por conflicto en Sumapaz

Hoy la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, el gobernador del Meta, Juan Zuluaga y el gobernador de Cundinamarca, Nicolás García, se reúnen para analizar  la situación que se viene presentando en el Sumapaz, en donde hay amenazas de presencia guerrillera que nos han obligado a generar diversas alertas en los últimos días.

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EL TIEMPO ya había relatado la cruda situación que se vive en varias localidades. El homicidio de Carlos Julio Tautiva, uno de los líderes sindicales más importantes de la región del Sumapaz, el pasado 11 de abril en la vereda Lagunilla, puso la lupa de las autoridades sobre la silenciosa guerra que libran los grupos armados en esa zona por el control de la ruta de armas y narcotráfico.

A esa muerte se sumó también la de Luisa Isabel Moreno, líder social de la localidad de Ciudad Bolívar, quien fue hallada sin vida en la sala de su casa el sábado, y otros siete asesinatos, de civiles, registrados el pasado viernes, uno de los días más violentos este año en la capital del país.

Además, de acuerdo con el último reporte de la Personería de Bogotá, en lo que va del año se han registrado 68 casos de amenazas a líderes sociales, de las cuales 32 se conocieron en febrero y 10 en los primeros días de abril. Según el informe, del total de los casos, 44 corresponden a hombres y 24 a mujeres. Entre las localidades más afectadas por este fenómeno delictivo están Ciudad Bolívar y Sumapaz.

Según expertos consultados por EL TIEMPO, los hechos de los últimos meses, que en su mayoría se han concentrado en Ciudad Bolívar, podrían ser el reflejo de la crisis de seguridad que ha sido permanente en Sumapaz y que termina impactando a otras localidades del cinturón oriental, como Usme y San Cristóbal.

Esos territorios históricamente han sido utilizados por estructuras criminales y grupos armados como corredores de las economías ilegales que de Bogotá van hacia Caquetá, Meta y Tolima.

Abril de 2022 también fue un mes violento para la región del Sumapaz, incluso para estas mismas fechas el año pasado también habían asesinado a un líder social de 33 años en la misma vereda donde murió hace unos días uno de los sindicalistas más importantes de la zona, Carlos Julio Tautiva, con el mismo modus operandi: dos hombres armados le dispararon dentro de su casa.

El conflicto en esta zona de la región está marcado por la lucha territorial entre las organizaciones campesinas y los grupos armados que se han asentado en el territorio porque, como lo menciona Juana Cabezas, investigadora de Indepaz, “las guerrillas tenían una base política muy fuerte allí, que durante los últimos meses se transformó porque el fortalecimiento de la comunidad generó un proceso de control territorial”.

Según la investigadora, la presencia de organizaciones sociales robustas ha empezado a competir con los intereses de los grupos criminales tradicionales, lo que ha desembocado en una guerra no solo entre las grandes estructuras, sino, además, en una confrontación con la comunidad por la defensa del territorio.

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Ahora, de acuerdo a la información recopilada por EL TIEMPO, de las bases de datos de Indepaz, la Fiscalía, los reporte de la Secretaría de Seguridad de Bogotá y las alertas de Personaría, hay registros que indican que a la fecha, en Sumapaz, habría una marcada presencia de grupos como las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (‘clan del Golfo’) y el frente 10 de las disidencias de las Farc, que viene de Arauca y Casanare. También una nueva incursión del frente 51, perteneciente al bloque sur oriental de ‘Iván Mordisco’.

Por otro lado, las investigaciones también dan cuenta de la presencia de otro tipo de grupos criminales que han incursionado en la zona con el propósito de controlar las rutas del narcotráfico como ‘los Paisas’, ‘las Águilas Negras’ y el Eln, que mediante la tercerización de las actuaciones delictivas, impactan la seguridad de la región con asesinatos por ajustes de cuentas, amenazas y hasta desplazamiento interno.

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“Aunque las AGC no tenían tanta incidencia allí, han empezado a aparecer amenazas mediante panfletos a quienes ejercen algún tipo de liderazgo sobre la tierra. Otro tema es la tercerización de las bandas locales, que han expandido las actividades ilegales de los grandes grupos por zonas de Soacha y Ciudad Bolívar”, explicó Cabezas.

Andrés Nieto, exsubsecretario de Seguridad de Bogotá y docente de la Universidad Central, señaló que la situación actual del Sumapaz es el resultado de la desatención de las istraciones sobre las alertas emitidas desde 2017 por la Defensoría del Pueblo y la Personería sobre los fenómenos de seguridad que se estaban dando en la región.

“Duramos cuatro años en los que la istración de su momento no aceptó que allá habían ese tipo de grupos y enfrentamientos y en medio de eso siempre han quedado los líderes sociales que son un obstáculo para las organizaciones criminales”, apuntó.

Y es que, justamente, desde hace un año la Unidad Investigativa de este medio ya había revelado que las evidencias encontradas en los computadores de estructuras de ‘Gentil Duarte’, en junio de 2021, daban cuenta de un despliegue de enlaces activos de esta organización en Kennedy, Ciudad Bolívar y Santa Fe.

Esa información habría confirmado con antelación lo que los investigadores le dijeron a EL TIEMPO: el encuentro entre los grupos de ‘Duarte’ y la ‘Nueva Marquetalia’ estarían desatando una batalla campal por recuperar los territorios que eran de las Farc en Sumapaz.

Redacción Bogotá. ELTIEMPO

JONATHAN TORO ROMERO