Tras la asunción de Donald Trump y en el marco la promesa de deportaciones masivas, se multiplicaron las redadas d
el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés)
, no solo en territorio estadounidense, sino también en Puerto Rico, en el epicentro de la isla.
Según lo recopilado por
El País, las calles de Barrio Obrero, ubicado en San Juan, la capital puertorriqueña
, están ocupadas por agentes de ICE producto de las redadas masivas que se dieron en la zona. La primera de ella se dio tan solo 6 días después de que el presidente asumiera el cargo en la Casa Blanca.
De esta forma, queda demostrado que Puerto Rico no está exento de las redadas y deportaciones impulsadas por Trump: desde ese momento 445 personas fueron detenidas en la isla, según datos compartidos al mismo medio por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés).
Al detalle de esos números, casi el 72 por ciento de los detenidos son ciudadanos dominicanos, haitianos, venezolanos y mexicanos. De ellos, 371 se dieron por ser inmigrantes ilegales o tener problemas de papeles, mientras que el 74 son arrestos criminales (tan solo 16,6 por del total).
La preocupación creciente en Puerto Rico por las redadas de ICE
A pesar de que la isla caribeña sigue dependiendo de Estados Unidos, la población se siente más cerca de Latinoamérica e incluso en sus calles se habla español. Si bien explican que las redadas siempre han existido, pero no al nivel que se ve ahora, por lo cual las organizaciones que apoyan migrantes han acudido al territorio.
Annette Martínez Orabona, la directora ejecutiva de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) en Puerto Rico, explicó: “Yo sé que en cualquier parte de Estados Unidos es terrible, pero en el caso de Puerto Rico es peor, porque nosotros no estamos contiguos al territorio. No es cuestión de tú montarte en un carro y llegar”