Un enorme número de personas llegan hasta Estados Unidos con la intención de solicitar el estatus de asilo. Mientras obtienen una respuesta por parte del Servicio de Ciudadanía e Inmigración (Uscis, por sus siglas en inglés), deben permanecer en el territorio, pero, en algunos estados, el trato que reciben es hostil. Aunque hay algunos otros que están dispuestos a recibirlos de la mejor manera, tal es el caso de Colorado, específicamente en la ciudad de Denver.
A través de un comunicado, el alcalde de Denver, Mike Johnston, dio a conocer un plan con la intención de brindar una respuesta sostenible a largo plazo a las crisis de los recién llegados en busca de asilo con la intención evitar recortes significativos a los servicios públicos.
La ciudad atravesaba un momento complicado debido a la enorme cantidad de inmigrantes que estaban llegando a la zona, a los cuales se han comprometido a brindarles albergues y algunos servicios.
Esto afectaba las finanzas gubernamentales, pero ahora, han anunciado un plan para poder mantener al menos durante 2024 los programas en apoyo a los recién llegados.
Según lo dado a conocer por las autoridades, el nuevo programa está orientado a reducir a la mitad el costo anual proyectado para atender a los solicitantes de asilos. Asimismo, aseguran que destinarán un paquete de US$45'900.000 para poder mantener los apoyos, sin que eso afecte las finanzas de la ciudad, por lo que, aseguran, no habrá despidos.
Sobre el tema, el alcalde expresó en un comunicado: "después de más de un año de enfrentar juntos esta crisis,Denver finalmente tiene un plan sostenible para tratar a nuestros recién llegados con dignidad y al mismo tiempo evitar los peores recortes en los servicios de la ciudad.
Muchas veces no dijeron que no podíamos ser compasivos y al mismo tiempo ser fiscalmente responsables. Hoy es una prueba de que nuestros desafíos más difíciles aún tienen solución y que juntos somos quienes los resolveremos".
Y es que, debido a la crisis por sostener los albergues para los migrantes, la ciudad había tenido que tomar algunas decisiones como cerrar o reducir los horarios de servicio de algunos centros recreativos y las oficinas de trámites vehiculares. Pero a través de este nuevo presupuesto, se comprometió a reabrirlos y regresar a los horarios de funcionamiento regulares.
Para lograrlo, explicaron las autoridades, tuvieron que buscar nuevas fuentes de financiación a través de medidas como la reducción de la contratación para puestos difíciles, menos compras de suministros y el aplazamiento de algunos proyectos de capital y tecnología. Con todo ello, esperan lograr un ahorro superior a los US$45'000.000 que se sumarán al presupuesto ya destinado para atender a los recién llegados.
Un gran número de migrantes siguen llegando a Estados Unidos. Foto:EFE
¿Cómo funcionará el programa de solicitantes de asilo en Denver?
La necesidad de un nuevo plan responde a que la ciudad ha experimentado en los últimos dieciséis meses tasas de migración significativamente mayores. De acuerdo con cifras oficiales, Denver ha atendido a más de 40.000 recién llegados, la mayor cantidad per cápita de cualquier ciudad del país, lo que ha significado un costo superior a los US$68'000.000.
Con su nuevo plan presupuestario, el programa de solicitantes de asilo de Denver abrirá sus puertas a las aproximadamente 1.000 personas que actualmente se encuentran en el sistema de refugios para recién llegados de la ciudad y están solicitando el estatus de protección, lo que significa que tienen que esperar al menos 180 días para recibir una autorización de trabajo.
Los inmigrantes serán beneficiarios de programas que les acercarán opciones de asistencia de vivienda, además preparación para solicitar su permiso de trabajo y capacitación laboral a través de asociaciones sin fines de lucro, empresas locales e instituciones educativas. También podrán acceder a cursos de inglés.
No obstante, cabe decir que este programa está limitado a quienes ya se encuentran dentro del sistema de albergues de la ciudad, así como las familias que reciben alojamiento a través de la asociación de Caridades Católicas y la Arquidiócesis de Denver.
Quienes llegaron a la ciudad después del 10 de abril únicamente recibirán una estadía de corto plazo en un sitio de congregación y recibirán asistencia para dirigirse a otro destino.
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