Pese a los reveses económicos sufridos por las empresas del país por cuenta de la pandemia, seis de cada diez han logrado mantener sus plantas de personal. No obstante, del 33 por ciento que sí la redujo por esta causa, el 38,4 por ciento dijo haberlo hecho en una proporción superior al 80 por ciento.
Pese a los reveses económicos sufridos por las empresas del país por cuenta de la pandemia, seis de cada diez han logrado mantener sus plantas de personal. No obstante, del 33 por ciento que sí la redujo por esta causa, el 38,4 por ciento dijo haberlo hecho en una proporción superior al 80 por ciento.
Estos datos hacen parte de los hallazgos de la encuesta de las Cámaras de Comercio de Seguimiento y Monitoreo del Impacto del Covid-19 en el Sector Empresarial, de la Red de Cámaras de Comercio (Confecámaras). Este sondeo se llevó a cabo entre el 18 de enero y el 17 de febrero, y en ella participaron 8.263 empresas del país.
El 91 por ciento son microempresas, el 2 por ciento medianas, el 1 por ciento pequeñas y solo el 6 por ciento, grandes; el 78,6 por ciento de ellas están en los sectores de comercio y servicios, el 13,4 por ciento en el de industria, el 3,8 por ciento en construcción, el 2,7 por ciento en otros sectores, el 1,4 por ciento en agricultura y solo el 0,2 por ciento en el extractivo.
A pesar de los esfuerzos hechos por estos negocios para mantenerse a flote, el 90 por ciento señala que no está en capacidad financiera o productiva para soportar más medidas restrictivas, como las adoptadas contra el covid-19.
Esa es la razón por la cual el 52,8 por ciento sostiene que en un escenario de nuevos confinamientos tendrían que reducir personal; preocupa que, de ese total, el 67 por ciento despediría al 50 por ciento o más de sus empleados. Apenas un 1,3 por ciento considera que estaría en capacidad de aumentar la planta de trabajadores.
Ventas, a la baja
Otro factor que se suma a esa consideración tiene que ver con el comportamiento de las ventas durante la pandemia. Vale decir, para empezar, que estos negocios diversificaron sus canales para poder llegar a los clientes.
Del total de las consultadas, en esta etapa solo el 37 por ciento mantuvo su comercio presencial, el 25,3 por ciento combinó presencialidad y domicilios, el 16,7 por ciento optó por vender por redes sociales, el 11,4 por ciento a través de internet o market place y el 9,5 por ciento se decantó por los domicilios.
Aun así, el 65,2 por ciento de las empresas sufrió una reducción en sus ventas (el 65 por ciento en un 50 por ciento o más), frente a un 23,4 por ciento que lograron mantenerlas y un 11,5 por ciento que crecieron en este aspecto.
A raíz de la experiencia vivida este año, el 86,3 por ciento piensa que sus ventas se reducirían en un escenario de nuevas restricciones. De hecho, el 61,3 por ciento proyecta que tendría que operar de forma mixta, presencial o remota. El 38,7 por ciento tendría que cerrar temporal o definitivamente su empresa.
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